Vale, todo esto lo empecé yo pero estoy totalmente justificado. No vale hacerte la víctima ni dejarme como el malo de la película. Simplemente he dejado de decir ciertas cosas para poder ignorar mis sentimientos y tú ¿Cómo me lo pagas? Buscándome más y más, echándome en cara que ya no te dedico mí te quiero. Ahora eres tu quien me evita, se nota que estas molesto conmigo. ¿No entiendes que lo hago por ayudarme? No seas egoísta, para ya. Me preguntas ‘¿Qué te pasa?’ y te respondo con un ‘nada’; miento, y se que hago mal.
Me atacas con que no soy el mismo de antes, que he cambiado contigo, pero, ¿por qué le das tanta importancia? No he cambiado por simple capricho. Simplemente quiero evitar el error que he estado cometiendo día tras día… no quiero seguir enamorándome de ti. Esta es la razón de mi cambio ¿te parece poco? Sinceramente, te has convertido en lo mejor que he tenido.
Cuando pienso en el momento en el que estuve a punto de darte mi amor, comencé a comprender y vi lo difícil que sería todo. Gracias a Dios que esquivé la bala, estoy tan harto, así que cariño ‘‘gracias por todo’’.
Ya hace tiempo que no me dices te quiero. Las vueltas que da la vida, ahora soy yo el que quiere volver a tenerlos.
Te quiero tanto…
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